Laura Julià

Laura Julià empezó a interesarse por la medicina natural en la facultad, en las asignaturas optativas que escogió. Su primera paciente fué su madre y allí vió que marcando objetivos y siguiendo unos hábitos saludables, los pacientes pueden conseguir lo que uno se propone. Le encanta ayudar y acompañar a las personas a conseguir su bienestar físico y emocional, por ello, integra en sus consultas de nutrición, la educación y la consciencia del paciente.

Cuéntanos brevemente quién eres y a qué te dedicas.

Me llamo Laura Julià Sevé, tengo pasión por la naturaleza y la escalada, me dedico a la nutrición desde que finalicé la carrera de Dietista-Nutricionista en 2009. Me gusta promover la educación nutricional en la consulta ya que creo que los cambios de hábitos son gracias a los conocimientos que adquirimos. Creo que somos energía y necesitamos vivir en equilibrio, tengo el nivel II de Reiki y trabajo con las flores de Bach.

¿Cómo es un día habitual en tu vida?

Realmente no son siempre rutinarios, me gusta irme a dormir pronto y levantarme temprano para disfrutar de un paseo con lo sonidos de la naturaleza acompañada por Bou, mi amigo de cuatro patas. Compagino las consultas de nutrición, con charlas de educación alimentaria, elaboración de menús escolares y el apoyo en empresas para la elaboración de productos nutricionalmente saludables.

En mi día a día no puede faltar la práctica de Yoga o de escalada y los pensamientos positivos.

¿En qué momento de tu vida empezaste a interesarte por las terapias naturales?

Fue en la universidad, ya que escogí una optativa dónde nos enseñaron a que era la Meditación, las Flores de Bach y la Fitoterapia, mi entusiasmo por la nutrición clínica me hizo centrarme en el poder de las plantas y en cómo podían ayudar en la prevención y en la actuación de enfermedades. Con el paso del tiempo y mis experiencias laborales decidí en 2015 fusionar la nutrición con las terapias naturales, en ese me momento hice la iniciación al reiki y me reciclé en flores de Bach. En 2017, gracias a una charla de promoción de la salud conocí el Parc de les Olors de Cal Vilanova y el Institut IGEM. Actualmente soy la nutricionista de la clínica IGEM y realizo en la escuela IGEM, mis estudios de Kinesiología Holística, una terapia que me tiene fascinada.  

¿Qué estudios has realizado relacionados con tu profesión?

Empecé con la diplomatura Dietista – Nutricionista en la Universidad de Vic (UVIC) donde también me formé con las terapias naturales, me especialicé en Nutrición Clínica con el Máster en Nutrición y Metabolismo el año 2012 por la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona (URV). La ciencia es variable y considero que los conocimientos hay que reciclarlos constantemente con investigación y aprendizaje por eso me gusta leer estudios científicos publicados.

¿Podrías compartir con nosotros alguna anécdota que te haya ocurrido como terapeuta?

Como dietista – nutricionista mi primera paciente fue mi madre. Ella siempre había sido adicta a las dietas milagrosas, dietas que a la larga pueden tener efectos nocivos para la salud. Cuando finalicé mis estudios fue un reto para mí, llevaba más de 20 años con Obesidad tipo I y empezaba a tener enfermedades causantes del exceso de peso. Poco a poco, marcando objetivos a corto plazo fue al cabo de 2 años y medio conseguimos llegar a un normopeso y con ello salir del riesgo para la salud que comporta la obesidad, actualmente sigue con unos hábitos de vida saludable.

¿Qué es lo que más te apasiona relacionado con tu trabajo?

Ver como los cambios de hábitos ayudan a las personas a aumentar su bienestar, su equilibrio emocional y con ello a mejorar su salud. Somos lo que comemos, por eso debemos vivir en salud y somos energía, por eso tenemos que vivir en equilibrio y armonía.